ENCUENTRO DE SACERDOTES DEL NUEVO MILENIO
Durante los días 11, 12 y 13 de Abril en la Casa de Encuentros de la Posada de San Agustín en la Candelaria, se realizó el Encuentro de Sacerdotes de la Provincia Eclesiástica de Tunja, ordenados a partir del año 2000. El objetivo de este evento ofrecer a los sacerdotes un espacio de formación, recreación y fortalecer vínculos de fraternidad. Esta actividad estuvo dirigida por el P. Francisco Mejía, de la Conferencia Episcopal de Colombia y contó con la presencia de los Señores Obispos de la Provincia Eclesiástica: Monseñor Luis Augusto Castro, Arzobispo de Tunja; Monseñor Misael Vaca Ramírez, Obispo de Duitama- Sogamoso y Monseñor Luis Felipe Sánchez, Obispo de la Diócesis de Chiquinquirá.
Agradecimiento especial a Nuestro Obispo, al Comité organizador y a quienes hicieron posible el éxito de este encuentro con Dios y con los hermanos sacerdotes.
DECIMO CUARTO ANIVERSARIO DE CONSAGRACIÓN EPISCOPAL
El Presbiterio, las Comunidades Religiosas, Diáconos, Seminaristas y Fieles Laicos agradecemos a Dios el Ministerio Episcopal de nuestro Pastor Diocesano, Monseñor Luis Felipe Sánchez Aponte, quien el domingo 22 de abril día del BUEN PASTOR, celebra un aniversario más de Consagración Episcopal. Pedimos al Señor Jesús, Modelo de Pastor y a Nuestra Señora del Rosario, Patrona de Colombia, le concedan muchas bendiciones y lo continúen iluminando y guiando en esta misión que le ha sido confiada.
FIESTA DEL BUEN PASTOR
Este Domingo IV de Pascua, la iglesia celebra la Fiesta de Jesús Buen Pastor. Agradecemos a Dios la Vida y Misión de nuestro Padre y Pastor Monseñor Luis Felipe Sánchez Aponte, quien unido a su Presbiterio, ha guiado su rebaño por las verdes praderas de la Fidelidad y Amor al Señor. Igualmente agradecemos al Señor por nuestros Seminaristas de la Diócesis y por tantos laicos que colaboran en la Pastoral de nuestra iglesia y pedimos al Altísimo siga llamado jóvenes que con Valentía y Radicalidad le digan Si al Señor y se comprometan como sacerdotes o religiosos al anuncio del Reino de Dios.
Oremos al Dueño de la mies, continúe enviando obreros que con audacia y esperanza lleven el Evangelio a aquellos lugares del mundo donde aún la Buena Noticia de Dios no se conoce.